- ¿Todavía te duele la cabeza?
- No. ¿por?
- Traes muy rojos los ojos.
- Que raro... los traía bien antes de fumar...
jueves, 10 de abril de 2008
miércoles, 2 de abril de 2008
El cigarro y el perro.
"¡No sueltes ese pinche humo!" parecía retumbar el ladrido del perro en sus recuerdos.
"Te vas a arrepentir... yo se lo que te ladro".
Sin embargo todo aquello que lo detenía se esfumaba en el aire a la par de las bocanadas de humo que escupía a toda velocidad.
Ese perro tenía el hocico embarrado de razón pero él en el suyo ya no tenía el humo.
"Te vas a arrepentir... yo se lo que te ladro".
Sin embargo todo aquello que lo detenía se esfumaba en el aire a la par de las bocanadas de humo que escupía a toda velocidad.
Ese perro tenía el hocico embarrado de razón pero él en el suyo ya no tenía el humo.
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