viernes, 21 de noviembre de 2008

Demonio con cara de perro

Sigue sentado ahí, no sé como correrlo.

Intenté de todo, gritos, periodicazos, agua fría, regaños, súplicas pero nada funcionó.

Desde el sillón me ladra con su boca llena de humo: "No digas que no te lo dije..."

Hoy me senté junto a él y tome una fuerte bocanada de su humo, de mi humo.

Lo veo, afila el colmillo y se prepara para darme una mordida. Le pedí que fuera a la femoral y no a la yugular... sólo por variarle al rollo.

Está por demás contarte que no me hizo ni puto caso, se empeña en darme rasguños en la espalda, en la nuca y en las piernas. Rasguños de comillos.
El problema es que a tí los rasguños de los perros se te curan y a mí quien sabe hasta cuando se me quiten por aquello de la cicatrización queloide.

- "A ver pa' cuando se te infectan pinche bacterias".
- (Silencio).

No ha ladrado otra vez ¿será que está sentido ahí sentado por que no le acaricio? ¡Me vale!

Por la mirada en sus ojos me temo que ésto no terminará pronto...

lunes, 17 de noviembre de 2008

Baila Monstruo

Mientras tanto en un lugar no muy lejano:

- Yo nunca aprendí a bailar, yo nunca aprendí a bailar, yo nunca aprendí a bailar.
- Repetirlo no va a revertirlo o ¿qué crees?
- No es eso...
- Tú sólo sabes decir las cosas mas inapropiadas en el momento menos oportuno.
- Sería chido ganarse la vida haciendo eso ...
- En verdad lo dudo, además, a veces tienes que decir algo interesante para variar.
- ¿Ya te dije que yo nunca aprendí a bailar?
- ¿Lo ves? ya bailó Bertha.
- Baila Monstruo, baila Monstruo, baila Monstruo, baila Monstruo, baila Monstruo, baila Monstruo, baila Monstruo, baila Monstruo, baila Monstruo, baila Monstruo, baila Monstruo.... ¡guaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaau!

domingo, 16 de noviembre de 2008

Diálogos en confianza

- Ahora ¿de qué te ries?
- Es que... me hiciste llorar...

¡Aplausos!

martes, 11 de noviembre de 2008

¿Uña mas?

Me arranqué una uña de tajo. Quedan otras 19 pero ya no me trae chiste...
Me arranqué los pelos de la barba mas de 19 veces en menos de un mes, una vez más ya no me chiste me trae.

-¿Qué te traes?
-Me duele la panza...
-¿Y tus uñas?
-¡Me las comí!
-¿Y mis uñas?
-No me las lleve...
-Que chiste.
-A veces soy chistoso... je!
-La verdad es que... ¡no!